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ITIonto arriba y campo abiorto.
öocos Do gloria y Do triunfo:
¡5oy Dol 5.° Regimiento!
Albcrti
-ocr page 3-
sirvieron para orga-
nizar los primeros
grupos de combatien-
tes. Muchos de ellos,
después de haber to-
mado parte en la re-
ducción de los mili-
tares traidores que se
habían refugiado en
el cuartel de la Mon-
taña, marcharon in-
mediatamente, con
los trofeos cogidos al
enemigo, fusiles y
municiones, a la Sie-
rra, a Alcalá y a Ge-
tafe, a someter a los
otros núcleos traido-
res en estos últimos
lugares y a contentar
en Guadarrama y So-
• mosierfa las colum-
nas que, dirigios por
el traidor Mola, avan-
zaban sobre Madrid.
^
L_
\lWHIHIIHHmmAB NUK IK tltfl«lU> KUUKUlUU. 3 ;
-ocr page 4-
Oprimía y lle-
naba de tristeza
a una de las ba-
rriadas más po-
pulares de Ma-
drid. Era de las
más firmes po-
siciones de los
frailes salesia-
nos su convento
de Francos Ro-
dríguez
uS
i
■*?*»
m
131
i
El pueblo en armas la
dló vida y alegría.
Organización, activi-
dad, afán de hacer
de aquel lugar la cu-
na de un Ejército que
se cubriera de gloria
en la lucho por la li-
bertad do Espuria
M&¡
-ocr page 5-
EL HOMRE
US el c'api-
tal más
precioso», ha
dicho Stalin,
y precisamen-
te a los alum-
nos de una es-
cuela militar.
El 5." Regi-
miento se se-
ñaló el objeti-
vo de hacer de
cada uno de
sus milicianos
un combatiente cons-
ciente. Físicamente
sanos, militarmente
entrenados, política-
mente seguros. Para
que reunieran todas
estas condiciones no
regateó esfuerzos. El
combatiente no era
instrumento: era un
hombre que iba
a luchar por una
causa humana.
Cuidando no ol-
vidar nunca es-
ta condición, la
disciplina tenía
un carácter de
camaradería,
sin que por ello
sufriese menos-
cabo la buena
organización en general y las relacio-
nes de jefes a milicianos. La familia
del miliciano era atendida por el Re-
gimiento. Desde los primeros días de
la guerra, el miliciano del 5.f Regi-
miento tuvo la seguridad de que sus
familiares no iban a ser abandonados,
y él encontraba en el cuartel, además
de su nueva vida militar, la continua-
ción de su vida política.
TFWtoKiAB NnníumiauMiuu
-ocr page 6-
El periódico mural, tribuna de
polémica y crítica. En él expo-
nían los milicianos de todas las
tendencias sus iniciativas y ■
opiniones                    j
Hubo que organizado
todo: Servicio de Sani-
dad, Intendencia, Sec-
ción Cultural, Escuela
Militar, etc. Pero el mi-
liciano tenía familia, y
había que darle la segu-
ridad de que sus seres
más queridos no estaban
abandonados en la reta-
guardia. Para ello el
Regimiento montó un
servicio de ayuda a los
familiares y mi hogar
infantil.
La organización, ade-
más, no podía concretar-
se únicamente al mili-
ciano como combatien-
te, ni como ciudadano.
Había de abarcar al Re-
gimiento en su conjunto,
en todas sus relaciones
con el Gobierno del
Frente Popular, y en
virtud de esa organiza-
ción pudo siempre decir
al Gobierno, en cual-
quier momento, los efec-
tivos con que contaba y
la composición política
y social del 5.° Regi-
miento.
te
Un comedor amplio y ale-
gre, construido por los
propios milicianos
El miliciano que demostraba aptitudes para
ello recibía clases de técnica militar para ■
pasar a ocupar puestos de mando 4
-ocr page 7-
MILICIANOS,
LAS 0R6AMZACI0HES ANTIFASCISTAS,
DESDE EL CAIMITO AL EIÏI
PLEADO, J0UEHES Y UIEJOS.
PROPORCIÓN POR OFICIOS....
..POR ORGANIZACIONES POLÍTICAS...
..SIN PARTIDO....
SINDICATOS
AUTÓNOMOS
U.G.T.
I I
..POR SINDICATOS....
85% 20% 10%
..SIN SINDICAR
5%
Y POR EDADES.
24.100
I
DICBRE.
NOVBRE.
OCTUBRE
SEPTBRE.
AGOSTO
f b
ttiFiimiFmmAa mut n
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Madrid, 18 de octubre de 1936
MILICIA POPULAR
Defender Madrid desde los frentes
Es indudable que ios .facciosos no han abandonado su tentativa de mar-
char sobre Madrid. Demasiada importancia tendría, sobre «Tolano nacional
4
Madrid, 23 de «^^gg ^JP***1* l 'A ' P ° PU ^ * -^
LAS ARMAS AL FRENTE
PENA DE MUERTE AL LADRÓN j
5.° Regimiento de Milicias Populares
■A*,A~ *í««r.
dcitiüc raucos.
crear $m bat3ÎIones, com]
ící. tío por su tendencia política o
ijitica y militar, por su abnegai
Milicianos,: VA enemigo es cobarde y apela a los actos más
innobles para combatirnos,
hl procedimiento es enviar moros y legionarios que fin-
giéndose dispuestos a entregarse1—'"no disparar; nos vamos
con vosotros —cuando .se bailan próximos a nuestras líneas,
aprovechándose de la nobleza de los nuestros, disparan.
Contra esa táctica tan repulsiva y cobarde es preciso reac-
cionar, no dejándose ser víctima de elîa. Cuando los soldados.
moros o legionarios del enemigo se presenten ante nuestras
filas, el miliciano debe lomar toda ciase de precauciones para
evitar ser víctima de una sorpresa, no decidiendo más que
eon arreglo a las órdenes <¡e tos jefes. Hemos dado buenas
pruebas de nuestros nobles sentimientos, pero es preciso
estar prevenidos para évitât esa clase de ataques, propios de
la vileza del enemigo.
¡Alerta contra los procedimientos del fascismo!
Nuestra superioridad en combatientes le lleva a realizar
las maniobras más repugnantes.
5.' REGIMIENTO
18 noviembre 1936.
lartín de la Roja nos Índica qu
.... ia organización concreta .de tes Milicias templad
"77 «futra ílel enemigo.
En cada frente, en cada barrio, en cada ciudad y pueblo, una SOLA, :.
FJJERTE Y VALIENTE "MILICIA POPULAR".
A POPULAR
LA INSTRUCCIÓN MILITAR
,. Hoy salen para el frente hombres disciplinados, compañías bien equipa-
djuí, batallones bien preparados. ¡Qué diferencia entre ¡os grupos desordena-
do»; de ios primeros días y las Milicias de hoy! Se ha operado el milagro. Un j
pueblo heroico no sólo ha ido al frente, ha resistido, ha pasado a la ofensiva,
e • • '               " -                  ......              '               '                      'Ma-
¡MILICIANOS!
CulÉio con las coHverssciongs
La oreja M kmm &
I.» RBOlftllENTe QE MILIOIAS POPULARES
5.° REGIMIENTO DE MILICIAS POPULARES
¡indios la [api fle la República!
Madrid, 20 de octubre de 1936.
UADRID.
5. REGIMIENTO DE MILICIAS OPULARES
¡POR NUESTRA INDEPENDENCIA
NACIONAL!
¡PUEBLO DE MADRID!
¡HOY MÁS CUE NUNCA, EL FASCISMO NO PASARÁ!
llegara la conclusión de que es necesario un ejército
lina de hterrp. Artículos, discusiones y hasta
ado^esa^conclusión. Ya no la dis-
expresión
r.^__^-_'-^.--,--,á.-4.M;., i/1,;') il.l».v.i..LJj~'?~éJI-"-V. ks...^^J-i¿^T""^"^
"63. — Teléfono 50673 ~ Afta i. Nu>ner'oS.90 - Madrid,;*■ «le ochibre *d«.-.1»3f
------:------------------^_-----:----^i^4.-^^-¿T.,r/-,;^i¡|,J--;T¡-V'-v _■- . - ;.....¡-"i,; ij^f.
disciplina
¡¡PASAREMOS!!
''jiinca, al grito de    lograrlo. Porque Je tu sola vo-    bres que marchan bajo«¡nestra»
^í!M; debe respon-    luntad, pueblo de Madrid, depen-    banderas.
pueblo que supo    de la victoria.                                    1 Al ataque, 5," Regimiento! 1
el de la victoria       JAI Stáq4e, S.' Réfirtiéato!    que esté grito sea el de todo «•
Pasaremos!"             Esto grito, laníado un¿3a; «B «1    pl^fc'espafiol,'fisto a njorira»-
ne querer que no    Guadarrama por un teniente de    tes que ceder, porque es un pue-
es
Madrid, 24 de septiembre de 1936,
Vdú,,,»,,, 63. -- Teléfono 50673 - Año I. Número 194" Modrld, 1» de noviembre de l§36
EN DEFENSA DE MADRID
Mando único, plan de conjunfo, disciplina
de iíSerro
irmas. Hom- resto del aparato del Estado Mayor que correremos adonde él nos llame,
"".entrai y del Centro que se queda en La pluralidad del mando es una des-
5.° Regimiento de Milicias Populares
MADRILEÑOS:
¡TODO POR EL TRIUNFO!
¡TODO PARA LA GUERRA!
5 de noviembre de 1936.
5.° Regimiento de Milicias Populares
Madrid, de los madrileños
UtriA
i Esto debe terminar, si sa oui«-
ÜlftKIO&RS'RIGímtEI
Velazquez, 63. - Teléfono 50673 -- Ario I. Número 108 — Madrid, 23 de noviembre de 1936
¡Al ATAQUE, CAMARADAS!
Velúzquez, 63. -.reléfor,o 50673 -- Ano i. Número 94 - Modrld, 9 de "evle"'bre^leJ»-»6
«A LOS HOMBRES QUE CORREN. LAS
MUÑERES DEBEN ESCUPIRLES A LA CARA»
¡Al ataque, 5o Regimiento!
Nuo:                                          de la democracia mundial. Mu-
SU
-ocr page 9-
HEROES
Miles de combatientes cayeron heroicamente lu-
chando bajo las banderas del 5.° Regimiento en todos
los frentes de España. Obreros e intelectuales, repu-
blicanos y anarquistas, socialistas y comunistas.
Félix Bárzana, el primero. Los primeros días de la
lucha en la Sierra. Cuando se comenzaba a forjar el
glorioso Batallón Thaelmann. Y después, Benito
Sánchez: el capitán Benito, como era conocido en los
medios antifascistas de Madrid. Aquel hombre heroico,
capitán del Ejército, que dejó su carrera para colocarse
al lado del pueblo y que volvió a ser militar cuando
su técnica hizo falta para la organización de las pri-
meras Milicias. Juanito Fernández, el joven valiente
y decidido, proletario consciente, que en las crestas
de la Sierra iba a ampliar la lucha
que desde casi niño llevaba contra
los enemigos del pueblo, contra el
fascismo.
En Oropesa, Andrés Martin, diri-
gente de las Juventudes, comandan-
te del Regimiento «Pasionaria*.
Luchadores de diversas organiza-
ciones, de diversos partidos, todos
ellos con el único afán de
fascismo, de ser fieles <
que lucharon, de colocí
la bandera del Regin
cieron más popular t-
sacrificios y la sangr
FÜItftBInli Nfflll?.UtAHW KUUKtbUtO j¿
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l/iVK 1 i JLËjS
ONTANEROS-ESOUIADO
DEPORTISTAS
iLISTACF-BATAttO
i              ALPINO
IILKIAS
BULARES-
'icina de
lutamiento
kGAZTAMBIDE
N?42
5SRKIKIEHT0
DE MILICIAS
POPULARES
CAMP
EL TRIUNFO SOBRE EL FASCISMO CRIMI-
NAL, TE DARÁ PAZ, TIERRA T LIBERTAD
¡ VIVA LA REPÚBLICA DEMOCRÁTICA '■
EJEMSTO POPULAR
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-ocr page 12-
La mayoría de ellos entraron en el Regimiento como simples milicianos.
Obreros, auténticos hijos del pueblo trabajador, que demostraron capaci-
dad y aptitudes militares, asimilándose con rapidez el arte de la guerra.
Gozaron siempre de la confianza ilimitada de los camaradas que lucha-
ban a sus órdenes. Eran queridos por todos los combatientes del 5.° Re-
gimiento. Son populares y respetados por toda la España antifascista,
que ve en ellos una garantía de victoria.
Algunos proceden del antiguo Ejército. Se pusieron incondicionalmente
al servicio del pueblo, prestando a éste el mejor servicio que la guerra
podía exigirles: el poner sus conocimientos profesionales a disposición de los
nuevos combatientes, ayudando a forjar, los nuevos cuadros de mando.
Forjaron los jefes del 5.° Regimiento unidades de combate heroicas y
disciplinadas.
Entre los jefes, Dolores Ibarruri, Pasionaria, comandante de honor del
5.° Regimiento y miembro del Comité Central del Partido forjador del
5.° Regimiento.
Los comandantes del 5.° Regimiento son una muestra de lo que deben
ser los jefes del ¡gran Ejército Popular. Un grupo de auténticos militares
antifascistas, cuya labor en el futuro Ejército español será inmensa.
En ellos esta reunido todo lo que debe constituir el futuro militar es-
pañol: las honrosas excepciones del antiguo Ejército, muerto para siempre,
y los hombres salidos del seno de la clase trabajadora crearán el nuevo
Ejército.
El heroísmo y la visión clara de la realidad que ha distinguido al 5.°
Regimiento están concentrados en su plana mayor.
Hoy, los comandantes del 5.° Regimiento mandan fuerzas del Ejército
Popular, están al frente de divisiones, brigadas o de batallones. Y la lucha
demuestra cómo los jefes salidos de entre el pueblo están en condiciones de
saber dirigir una guerra como la nuestra, en la que se precisa conocer pro-
fundamente las características políticas que en ella se dan, y adaptar
las vicisitudes de la lucha a ellas, no olvidándolas jamás. Esto es lo
que tuvieron presente siempre los jefes del 5.° Regimiento de Milicias
Populares, tanto los que salieron del seno de la clase trabajadora como los
militares que a nuestro lado vinieron, poniéndose incondicionalmente al
servicio de la causa del pueblo.
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La mayoría de ellos entraron en el Regimiento como simples milicianos.
Obreros, auténticos hijos del pueblo trabajador, que demostraron capaci-
dad y aptitudes militares, asimilándose con rapidez el arte de la guerra.
Gozaron siempre de la confianza ilimitada de los camaradas que lucha-
ban a sus órdenes. Eran queridos por todos los combatientes del 5.° Re-
gimiento. Son populares y respetados por toda la España antifascista,
que ve en ellos una garantía de victoria.
Algunos proceden del antiguo Ejército. Se pusieran incondicionalmente
al servicio del pueblo, prestando a éste el mejor servicio que la guerra
podía exigirles: el poner sus conocimientos profesionales a disposición de los
nuevos combatientes, ayudando a forjar, los nuevos cuadros de mando.
Forjaron los jefes del 5.° Regimiento unidades de combate heroicas y
disciplinadas.
Entre los¡jefes, Dolores Ibarruri, Pasionaria, comandante de honor del
5.° Regimiento y miembro del Comité Central del Partido forjador del
5.° Regimiento.
Los comandantes del 5.° Regimiento son una muestra de lo que deben
ser los jefes del ¿gran Ejército Popular. Un grupo de auténticos militares
antifascistas, cuva labor en el futuro Ejército español será inmensa.
En ellos está reunido todo lo que debe constituir el futuro militar es-
pañol: las honrosas excepciones del antiguo Ejército, muerto para siempre,
y los hombres salidos del seno de la clase trabajadora crearán el nuevo
Ejército.
El heroísmo y la visión clara de la realidad que ha distinguido al 5.°
Regimiento están concentrados en su plana mayor.
Hoy, los comandantes del 5.° Regimiento mandan fuerzas del Ejército
Popular, están al frente de divisiones, brigadas o de batallones. Y la lucha
demuestra cómo los jefes salidos de entre el pueblo están en condiciones de
saber dirigir una guerra como la nuestra, en la que se precisa conocer pro-
fundamente las características políticas que en ella se dan, y adaptar
las vicisitudes de la lucha a ellas, no olvidándolas jamás. Esto es lo
que tuvieron presente siempre los jefes del 5.° Regimiento de Milicias
Populares, tanto los que salieron del seno de la clase trabajadora como los
militares que a nuestro lado vinieron, poniéndose incondicionalmente al
servicio de la causa del pueblo.
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KREGNSpâiLDÀTI
POPUUÉfef COLABOR/
EH LA1
iS REGIMIENTO DE MILICIAS POPULARES
Madrid tenía una tradi-
ción de lucha en defensa de
su independencia. Había
que reavivar ese sentimien-
to. Las jornadas qxie se ave-
cinaban iban a ser duras.
El 5.° Regimiento realizó
un intenso trabajo de agi-
tación. Movilizando a mi-
les de hombres y mujeres.
Utilizando nuevos métodos
de agitación, desconocidos
hasta entonces en España,
como el teatro en la callç.
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-g-
5."-REGIMIENTO DE MILICIAS POPULARES
Hila» la (api le la Rila!
5. REGIMIENTO DE MILICIAS POPULARES
¡PUEBLO DE MADRID!
iORGAKICEHIOS U DEPENS! DE LI GSPITUU
. Las consignas para la poblaciónó
civil y para los combatientes se ha-
cían llegar por medio de carteles,
manifiestos y todos los elementos
de agitación utilizables. El teatro.;
en la calle demostró ser uno de los
medios más eficaces para movili-
zar a las masas.
Las consignas para fortificar Ma-
drid, primero; para acudir a su de-
fensa, después, iban acompañadas
de demostraciones en las calles de
la capital, llevadas a cabo por ele-
mentos de la retaguardia. Los fren-
tes se fortalecían recibiendo las me-
jores fuerzas del 5.° Regimiento y
teniendo la seguridad de contar
con una retaguardia firme y heroi-
ca, que se ponía a tono con los lu-
chadores de las trincheras. La moral
se superó extraordinariamente. «¡No
pasaran» y «¡Pasaremos!» eran la ex-
presión de la voluntad de Madrid
de contener al fascismo a sus mis-
mas puertas y de abrirle en ellas su
sepultura.
¡SOMOS LOS DE JULIO!
I Pueblo de Madrid!
Sobre tu ciudad, que nó sólo es el corazón de España, sino también el
de la lucha antifascista del mundo, vuelve a pesar, lo mismo que en los dfas
de ¡ulio, la grave amenaza de las hordas rebeldes.
el mismo coraje con que supiste
Movilización de la población civil
QUINTO REGIMIENTO
iDÍ MILICIAS POPULARES
e, debes disponerte ahora, pue-
efensa de la libertad, de la inde-
uropa entera,
tea, que ningún periódico extran-
jamás que has renegado de tu
Para que Madrid sea inexpugnable
¥
siempre: I un pueblo de héroes!
ios los de ¡ulio!
m o si
"iBATAllfflfJ ÛE CHOQUE ^&SgtíSESÁ
. wjnr%m' n°y 9"° °.uerer'° *an ^e veras,
PARA LA ÙEFEHS ÙE MAüMlk%AvÜ£Í SW
¡MUJERES, OBREROS, ANTIFASCISTAS TO.
DOS/ALISTAOS EN IOS 4 BATALL0NE5 E N '
QUE OREAMZA El 5sREEIMIENTO PARA
LA DEFENSA OE MADRID- QUE ÜE LA5
FÁBBICA5 Y TMIERE5 SALEA IA MEJOR mtM.EL
ARMA MÂ5 DECISIVA RARA RASAR 50M II FAXI5M0.
condiciones: DisemmaFBA- buen estado físico-emamtía
nUTICABEUMAmeiHtZAdáHANnFASClSTA-lUBatSTAOOlMUFIIlNTf
0 SÍAU1A10EL SEMICIOMU/TAS'•
HOMBRES y MUJERES K MADRID; AL TERMIMM VUESTRO
TR/UU» ACUMD A «.I5TAR05.K 7 A 9.A IOS SKUIHITBilTiai:
BÂRMJIOÂ acL SUR, FUENTERRABÍA , 16
OÍSTE: CUARTEL DE U.H.P. SAN ÍERNAHOO, 97 r99
NORTE, FRANCOS RODRIQUEZ, 5
CITE : LUÍA, 29
Organicemos las Milicias de trábalo
Instrucción militar de todas las personas útiles
Nuestra victoria será la tamba del fascismo
Regimiento de Milicias Populares
Madrid, de los madrileños
El enemigo debía tomar Madrid hace tres dias. Lo prometió. Hubo ;
espíritus débiles que lo creyeron. Madrid fué nuestro. Nuestro como nunca.
El pueblo madrileño defendió su ciudad. Un solo miliciano, con sus bombas, |
marchó cantando "La I
milicianos que corrían. ]
uta, de la guerra justa.
(leras, con sus gritos, con
'S eran gallinas. Pero la
mpo. Desde el principio
i del cuartel de la Mon-
ir su propia cobardía.
i los legionarios, a los
de reconocer el Gobier-
Para justificar su "no
mujeres y niños
caiga en manos de los
y hacer pagar caro al;
ticia.
derrotas de las tropas
inepcia de unos genera-
O
drileños
adqui -
rieron la
moral de
sus ante-
pasados
de 1808.
Como — -
París en 1870 y Lenin-
grado en 1917, Madrid
estaba dispuesto a reva-
lidar su condición de ca-
pital. Elantifaseismodel
mundo entero dirige aun
hoy, al cabo de tres me-
ses de asedio, sus mira-
das confiadas hacia la
población de Madrid y
sus heroicos defensores.
■FEHDER MADRID
POLITICAMENTE SECIPOS. FÍSICAMENTE SA-
NOS MILITARMENTE ENTRENADOS.SIN
ABANDONAR LA PRODUCCIÓN. DE
20 A 50 ANOS
LUGARES PARA INSCRIBIRSE'.
ESTEJLISTñ 29             OESTE:SAN BERNARDO.97y99
Küi niFNTfíRABIA 15 NORTF fRANCOS B0DBIGUEZ.5 y
-ocr page 16-
DEFENSA
** CULTURA
Para salvar de los bombardeos fascistas la ri-
queza artística de España, el 5.° Regimiento
empleó gran parte de su esfuerzo
Artistas y sabios reunidos eñ el 5° Regimiento con los
jefes de éste, el día de su evacuación, De izquierda a
derecha: El poeta Antonio Machado, Mije, el profesor
Del Río Hortega, el comandante Carlos y el director de
la Biblioteca Nacional, señor Navarro Tomás
De izquierda a derecha: El pedagogo *
don Angel Llorca, el doctor Calandre, el
arqueólogo señor Gómez Moreno y el
doctor Flanelles, en el 5.° Regimiento
El presidente de la Academia Española,
don Ramón Ménéndez Pidal, hablando
con el capitán Ganivet en la Comisiónele
Trabajo Social del 5° Regimiento
Los «cazadores de tanques» (en el centro, Carrasco) ex-
plicando a sabios y artistas cómo han realizado su hazaña
LOS SABIOS V ARTISTAS ESPAÑOLES AL 5.° REGIRTIEHTO
«Los profesores, catedráticos de Universidad, mé-
dicos, poetas, investigadores, que salen para Valencia
por las gestiones, la ayuda del 5.° Regimiento y bajo
El pin-
I histo-
ueta
la orden de la Junta de Defensa, manifestada por su
comisario de Guerra, declaramos lo siguiente:
Jamás nosotros, académicos y catedráticos, poetas
si 5.° Regimiento,
su hermano y e
Arte, Ricardo Or
Artistas en i
tor Solana,
riador de
e investigadores, con títulos de Universidades espa-
ñolas y extranjeras, nos hemos sentido tan profunda-
mente arraigados a la tierra de nuestra patria; jamás
El sabio fisiólogo ingles Halda-
ne, en su visita al 5." Regimiento
De izquierda
a derecha: El
pintor Cris-
tóbal Ruiz, el
escultor Vic-
torio Macho
y el pintor
López Mez-
quita
^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^Jnos hemos sentido tan españoles como en el momento
que los madrileños que defienden la libertad de España nos han obligado a salir de Madrid
para que nuestra labor de investigación no se detenga, para librarnos en nuestro trabajo de
los bombardeos que sufre la población civil de la capital de España; jamás nos hemos sen-
tido tan españoles como cuando hemos visto que para librar nuestro tesoro artístico y cien-
tífico, los; milicianos que exponen su vida por el bien de Espaf^i se preocupan de salvar los
libros dé nuestras bibliotecas, los materiales de nuestros laboratorios, de las bombas incen-
diaríais que lanzan los aviones extranjeros sobre nuestros edificios de cultura.
Queremos expresar esta satisfacción, que nos honra como hombres, como científicos y como
españoles, ante eF mundo entero, ante toda la Humanidad civilizada.
Antonio Mapwdo.—Pío del Río Hortega.—Enrique Moles Ormella.—Isidro Sánchez Covisa.—Antonio Madi-
naveitia Tabugó.—José María Sacristán.—José Moreno Villa.—Miguel Prados Such.—Arturo Duperier Vallesa.i,
-ocr page 17-
Jamás ningún ejército, nin-
gún regimiento, se había pre-
ocupado hasta ahora, en Es-
paña, cíe realizar una labor
cultural. El 5.° Regimiento ha
sido el primero que ha roto
con esta tradición de barbarie
que pesaba sobre los cuarteles.
Las publicaciones del 5.° Re-
gimiento son una buena prue-
ba de ello. Están dedicadas a
temas de primordial interés
para un Ejército Popular, o
sea, político, y hay también
una antología de poesías de
guerra y obras literarias de
nuestros escritores jóvenes.
Uno de los folletos está de-
dicado a tema de tanto inte-
rés como la propaganda en
las filas enemigas, una de las
armas más poderosas para la
lucha contra el fascismo.
A los frentes llegó un arma
nueva. La experiencia adqui-
rida por el 5.° Regimiento, y
elementos que contribuyeran
a hacer al miliciano más cons-
ciente todavía, para que fuera
un buen soldado de la Re-
pública democrática.
-ocr page 18-
DTFsöRiï
^^0, hijo del pueblo, ciuda-
daño de la República Es-
pañola, tomo libremente la
condición de miliciano del Ejér-
cito del pueblo.
Me comprometo ante el pue-
blo español y el Gobierno de la
República, surgido de la victo-
ria del Frente Popular, a de-
fender con mi vida las liberta-
des democráticas, la causa del
progreso y de la paz; a exter-
minar definitivamente el fascis-
mo y a llevar con honor el tí-
tulo de miliciano.
Me comprometo a estudiar
las ciencias militares y a cuidar
escrupulosamente, previnién-
dolo de todo deterioro y posibi-
el material militar de i
Las fuerzas del 5.° Re-
gimiento estuvieron siempre
en el frente. Aun hoy, al cabo
de seis meses de guerra civil,
existen unidades que sólo dis-
frutaron breves días de des-
canso. Sin embargo, en todos
Jos frentes se distinguieron
siempre las fuerzas del 5.° Re-
gimiento por su abnegación,
por su espíritu alegre. La pro-
mesa que hacían antes de par-
tir para las trincheras era cum-
plida. El miliciano del 5.° Re-
gimiento continuaba recibiendo
en el frente educación política
y militar, que se iniciaba en
la retaguardia desde el primer
día de su ingreso en él.
Comida abundante, servida en las trincheras
En primer término, el comisario político de un Batallón
w *m
',. >.-,;
A trescientos metros de la línea de fuego se »»¿»*¿ «¡°
de incorporación al Ejército Popular de José Alcalá Zamora
Construyendo trincheras
lidad de hurto o extravío
El miliciano que apenas sabía manejar el fusil se ha asimilado
hoy ia técnica militar, utilizando con precisión todas las armas
propiedad nacional que me fuere confiado.
Me comprometo a guardar y hacer guardar la dis-
ciplina más rígida, cumpliendo con exactitud to-
das las órdenes de mis jefes y superiores jerár-
quicos.
Me comprometo a abstenerme de actos deshon-
rosos y a impedir que sean cometidos por mis ca-
ntaradas, poniendo todo mi empeño en conducir-
me siempre correctamente, con el pensamiento co-
locado en el alto ideal de la República democrática.
Me comprometo a acudir en defensa de la Re-
pública democrática española al primer llama-
miento del Gobierno, poniendo todo mi esfuerzo
y mi vida al servicio del régimen republicano y
del pueblo.
Si falto a este compromiso solemne voluntaria-
mente, que caiga sobre mí el desprecio de mis cama-
radas y me castigue la mano implacable de la lev.
PROMESA
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^L^O, hijo del pueblo, ciuda-
daño de la República Es-
pañola, tomo libremente la
condición de miliciano del Ejér-
cito del pueblo.
Me comprometo ante el pue-
blo español y el Gobierno de la
República, surgido de la victo-
ria del Frente Popular, a de-
fender con mi vida las liberta-
des democráticas, la causa del
progreso y de la paz; a exter-
minar definitivamente el fascis-
mo y a llevar con honor el tí-
tulo de miliciano.
Me comprometo a estudiar
las ciencias militares y a cuidar
escrupulosamente, previnién-
dolo de todo deterioro y posibi-
material militar de
Las fuerzas del 5.° Re-
gimiento estuvieron siempre
en el frente. Aun hoy, al cabo
de seis meses de guerra civil,
existen unidades que sólo dis-
frutaron breves días de des-
canso. Sin embargo, en todos
los frentes se distinguieron
siempre las fuerzas del 5.° Re-
gimiento por su abpegación,
por su espíritu alegre. La pro-
mesa que hacían antes de par-
tir para las trincheras era cum-
plida. El miliciano del 5.° Re-
gimiento continuaba recibiendo
en el frente educación política
y militar, que se iniciaba en
la retaguardia desde el primer
día de su ingreso en él.
Comida abundante, servida en las trincheras
mzfr l&r
En primer término, el comisario político de un Batallón
«¡7 '.ité
A trescientos metros de la línea de fuego^se ^ró el acto
de incorporación al Ejército Popular de José Alcalá Zamora
Construyendo trincheras
lidad de hurto o extravío, el
propiedad nacional que me fuere confiado.
Me comprometo a guardar y hacer guardar la dis-
ciplina más rígida, cumpliendo con exactitud to-
das las órdenes de mis jefes y superiores jerár-
quicos.
Me comprometo a abstenerme de actos deshon-
rosos y a impedir que sean cometidos por mis ca-
ntaradas, poniendo todo mi empeño en conducir-
me siempre correctamente, con el pensamiento co-
locado en el alto ideal de Ja República democrática.
Me comprometo a acudir en defensa de la Re-
pública democrática española al primer llama-
miento del Gobierno, poniendo todo mi esfuerzo
y mi vida al servicio del régimen republicano y
del pueblo.
Si falto a este compromiso solemne voluntaria-
mente, que caiga sobre mí el desprecio de mis cama-
radas y me castigue la mano implacable de là lev.
PROMESA
Nuestro Ejército tiene que ser una Universidad del Pueblo
DEL
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' Ejército Popular
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EJERCITO POPULAR
El Gobierno de la Re-
pública decidió crear el
Ejército Popular. El 5.a
Regimiento recibió con
alborozo la noticia. Se-
tenta mil combatientes,
una buena organización,
unos cuadros experi-
mentados, todo lo que
tenía, lo puso a disposi-
ción del Gobierno, aca-
tando con rapidez y dis-
ciplinadamente decreto
tan importante del Go-
bierno de la victoria.
Todos los antifascis-
tas de España y nues-
tros amigos del Extran-
jero recibieron la noti-
cia de la liquidación del
5.0 Regimiento para pa-
sar a formar parte del
Ejército Popular, con la
tristeza de ver desapa-
recer una organización
tan querida, pero con
la confianza, al mismo
tiempo, de que, como
dijo Pasionaria, «la se-
milla del 5.° Regimien-
to, llevando el sentido
de disciplina, de organi-
zación, de espíritu de sa-
crificio, para que el fas-
cismo no pueda realizar
sus criminales designios,
fructificará dentro del
gran Ejército Popular de
la República Española».
A testimoniar su cari-
ño y su admiración acu-
dieron al gran acto de
despedida del 5.0 Regimiento, celebrado en Madrid el 27 de Ene-
ro de. 1937, representantes de todos los frentes, jefes militares
de Divisiones y Brigadas, comisiones de los Sindicatos, pioneros
y mujeres antifascistas y, en representación de toda la pobla-
ción civil de la capital, el alcalde de Madrid.
Ejército Popular úni-
co, como condición para
ganar la guerra, era uno
de los sentimientos que
más a fondo se habían
apoderado de cuantos
componían el 5.0 Regi-
miento.
El Gobierno de la Re-
pública encomendó al
comandante-jefe del 5.°
Regimiento, a Enrique
Lister, la organización
de la i.a Brigada Mixta.
A esa unidad fué el es-
píritu del 5.0 Regimien-
to. El heroísmo, la dis-
ciplina, la abnegación
de los componentes de
la 1.» Brigada son ya
hoy populares. Pero sus
buenas cualidades no se
limitan sólo al terreno
militar, sino a todo lo
que va ligado con la
guerra. Ellos están en el
frente, pero piensan en
la retaguardia. De aquí
su decisión de dejar par-
te de sus haberes a be-
neficio del Tesoro pú-
blico. Ayudando desde
el frente o la retaguar-
dia para que la guerra
se gane rápidamente.
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Talleres de PRENSA 6RAFICA, S. A.
Hermosilla, 7S.-MADRID ^o